Descripci贸n:
1920-1930 Dm. 56x179,5 cm Metal, acero, vidrio La principal aplicaci贸n de la balanza de torsi贸n es determinar las anomal铆as que presenta la gravedad en la superficie terrestre, cuya medici贸n exacta ha permitido determinar con precisi贸n la forma de la Tierra. 脡stas son debidas a irregularidades locales de la superficie, originadas por la presencia en el subsuelo de masas, bien minerales, bien de densidad diferente a la del terreno que las rodea. Una de las consecuencias de la presencia de estas anomal铆as es la deformaci贸n de las 贸rbitas de los sat茅lites artificiales.
Este instrumento permite conocer dichas irregularidades a trav茅s de las perturbaciones que producen en el magnetismo terrestre. Consta de una barra horizontal provista de dos masas iguales en sus extremos, suspendida de un filamento el谩stico (un hilo de platino-iridio) cuya fuerza de torsi贸n es muy peque帽a, para aumentar la sensibilidad ante fuerzas externas. Si se provoca una torsi贸n determinada en el hilo, las oscilaciones de las esferas tardan un determinado tiempo en
amortiguarse (puede llegar a ser 1 hora, raz贸n por la que va provista de un reloj). Este tiempo puede verse modificado si alguna anomal铆a del terreno hace que una de las esferas sea atra铆da con m谩s intensidad que la otra. Si equilibramos la fuerza de atracci贸n, midiendo su fuerza comparativa mediante la resistencia del filamento a la torsi贸n, las variaciones registradas nos permitir谩n conocer estas anomal铆as.
Se halla provista de mecanismos para evitar las influencias de la temperatura o las corrientes de aire y de una c谩mara fotogr谩fica en la parte superior para registrar la posici贸n de equilibrio a trav茅s de los 谩ngulos de torsi贸n.
El Instituto Geogr谩fico adquiri贸 en 1924 una balanza de torsi贸n en los mismos talleres donde se fabric贸 este ejemplar, aunque desconocemos la relaci贸n entre ellas.